Algunos clientes nos preguntan por las llamadas casas industrializadas. Aunque se trata de una opción más económica y rápida de construcción, la mayoría de viviendas se siguen edificando de la forma tradicional. Te contamos por qué y la diferencia entre ambas alternativas.
¿Qué son las viviendas industrializadas?
La construcción artesanal de viviendas era el único método conocido hasta hace unos años. Este proceso comenzó a industrializarse hasta el nacimiento de las casas estandarizadas: aquellas que se construyen en una parcela con piezas ya fabricadas en el entorno industrial.
Pero ¿son lo mismo que las viviendas prefabricadas? La respuesta es no. Estas se construyen por completo en una fábrica para trasladarlas de forma posterior a otro lugar. Por ejemplo, este tipo de alojamientos son muy frecuentes en los campings.
¿En qué se distingue una casa industrializada de las viviendas habituales?
- La residencia tradicional ofrece más posibilidades de personalización y diseño. Además, permite hacer modificaciones sobre la marcha si es necesario. Este es el motivo por el que el arquitecto encargado de la construcción elabora un documento llamado «proyecto de fin de obra», en el que incluye los planos definitivos del diseño que se ha llevado a cabo.
- En las viviendas habituales, el arquitecto y el aparejador siguen el proceso de cerca para comprobar que todo se ejecuta de forma correcta. Los profesionales de un estudio de arquitectura conocen a la perfección la normativa de acuerdo a los criterios técnicos que revisa el perito municipal.
- El plazo de construcciones de viviendas industrializadas es menor. Al contar con las piezas, los tiempos de construcción pueden reducirse a la mitad. Sin embargo, existe menos margen de maniobra a la hora de solucionar contratiempos, ya que, en el caso de que una pieza tenga un defecto, habrá que pedir otra y esperar su llegada para continuar con el proceso de edificación.
- El presupuesto de las viviendas tradicionales puede personalizarse. Aunque algunas personas optan por las casas industrializadas por sus precios más bajos, las construcciones artesanales permiten ajustar el presupuesto a tu bolsillo. Además, tú puedes decidir qué materiales quieres emplear. De esta forma, conoces con detalle cómo y de qué está construida tu casa y puedes optar por materiales de calidad.
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